Detective Comics de Scott Snyder

Dada la aversión que me ha venido produciendo la obra de Scott Snyder en DC Comics tras haber finalizado su etapa de Batman, he decidido recordar algunos de sus trabajos más atractivos para la compañía y hablar de su breve etapa al frente de Detective Comics.

Esta etapa se sitúa justo antes de los acontecimientos de Flashpoint, es decir, antes de la reestructuración y relanzamiento del universo DC de los Nuevos 52. Dentro de este contexto, el manto de Batman lo llevaban dos personajes diferentes: Bruce Wayne, el Batman original, que se encuentra viajando por el mundo llevando la iniciativa de Batman Inc. a todas las grandes capitales del mundo y Dick Grayson, el primer Robin y posteriormente Nightwing, que se puso bajo el manto del murciélago tras la desaparición de su mentor y que, tras su regreso, continuó protegiendo Gotham City con su beneplácito. Y esta breve pero genial etapa de Scott Snyder en Detective Comics sigue algunas de las aventuras y experiencias de Dick Grayson bajo la capa y la capucha.

Scott Snyder comienza esta etapa con una historia que responde al nombre de "Espejo Oscuro" y que se ha convertido en un clásico moderno, o eso dicen muchos que la han leído y la han disfrutado. Sin embargo,  yo creo que es una historia que ya reinterpretó en su etapa de Batman y la mejoró con creces. Esta sigue a una organización secreta formada por personas de la alta sociedad de Gotham que, si bien no controla la economía y política de Gotham como lo haría el tribunal de los búhos, se dedica a subastar elementos pertenecientes a villanos y héroes de Gotham a la élite económica y a asesinar a cualquiera que se vaya de la lengua al respecto.

Aunque sí que trae personajes, conceptos y una estética (las subastas suceden con todos los participantes llevando máscaras de gas) interesantes, creo que todo queda bastante ensombrecido y superado cuando el mismo autor crea y cuenta la historia del tribunal de los búhos.

Sin embargo, lo realmente destacable de esta etapa, al menos en mi opinión, es la trama que va tratándose superficialmente desde el principio, con números dedicados a avanzar dicha trama entre arcos centrados en el comisario Gordon, que gana fuerza al final de la etapa y que tiene como tema central el regreso de James Gordon Jr. (el hijo del comisario y hermano de Barbara) a la ciudad de Gotham.

Aunque los arcos con historias autoconclusivas tienen, como el primero que he mencionado, elementos y villanos interesantes con tramas entretenidas con acción e investigación a partes iguales, la trama del hijo del comisario Gordon acaba siendo una historia de lo más profunda, adulta y muy bien contextualizada, con tintes detectivescos y con un tono que casi parecería digno de Nic Pizzolatto (True Detective).

En cuanto al apartado artístico, hay dos dibujantes durante la etapa: Jock y Francesco Francavilla. Por su parte, Jock sigue las aventuras de Dick Grayson bajo el manto del murcielago, por lo que se centra más en la acción y está presente en los arcos argumentales autoconclusivos; aunque no es de mis favoritos, su dibujo sienta bien a las historias de Batman por el tono tenebroso que es capaz de plasmar en las ambientaciones y en los antagonistas además de al propio murcielago. Francesco Francavilla, por otro lado, se encarga en esta etapa de seguir la historia del comisario Gordon y su hijo con su estilo más Pop y expresivo, que ayuda a imprimir un componente más emocional, pero que si no trabajase siempre con tonos de color tan cálidos, ayudarían a la ambientación oscura y tétrica de Gotham City. Cuando Batman toma cartas en el asunto y se une al comisario en la trama que afecta a su hijo, ambos dibujantes participan en la historia encargandose cada uno de sus respectivos personajes dentro de la historia, lo que ayuda mucho a ver la trama desde diferente prisma, el del justiciero y el del padre.

En definitiva, creo que esta es una etapa muy recomendable, no solo para aquellos que disfruten leyendo historias de Batman, sino para cualquiera que quiera disfrutar de buena lectura comiquera. Es una etapa redonda y muy interesante y que justifica completamente la confianza que depositó DC en Snyder para confiarle las aventuras del caballero oscuro en los nuevos 52 que tantas alegrías y grandes historias nos trajo. Además, tanto este Detective Comics como su Batman sirven de recordatorio de lo buen guionista que puede ser cuando tiene los pies en la tierra, muy lejos de los delirios de grandeza y pretensiones de emular y homenajear continuamente a Grant Morrison.